Tras una iniciación o curso de Reiki estamos tan fascinados que a veces nos pasamos de rosca con las expectativas, sobre lo que podemos conseguir gracias al Reiki. Y sí, el Reiki te ayuda muchísimo a nivel físico, mental y espiritual, pero a continuación te comento las 3 trampas que te puedes encontrar en el camino del Reiki. 
el camino del Reiki Madrid

TRAMPA nº 1 

La iniciación y el tratamiento de Reiki arregla mis problemas, me impulsa automáticamente sobre el plano espiritual sin que yo tenga que hacer nada. 

El Reiki te da mucha serenidad y paz interior para que, pase lo que pase en tu vida (tengas problemas laborales, enfermes, pierdas un ser querido, rompas con tu pareja…), lo puedas afrontar con sabiduría y paz interior. Los problemas seguirán existiendo y tú te tendrás que mover para arreglar esos problemas, la magia la haces tú, no el Reiki. La paz interior que te proporciona el Reiki te ayudará a tomar las decisiones correctas con claridad. 
Y tres cuartos de lo mismo pasa si vas a un terapeuta a que te dé sesiones de Reiki; por mucho que al terapeuta se le “fundan los plomos” dándote Reiki, si tú luego tienes malos hábitos de alimentación, llevas una vida desordenada, fumas como un carretero, te enfadas por todo, etc, etc, etc… entonces el Reiki poco te podrá ayudar. 
TRAMPA nº 2 
Debo recibir un montón de iniciaciones y cuanto más rápido haga los diferentes niveles de Reiki, mejor me irá en la vida y más rápido alcanzaré mis sueños. 
Por suerte o por desgracia, eso no es así. Todo depende en qué punto de vista nos pongamos. Si fuera tan fácil que haciendo unos cursos de terapias alternativas se nos arreglara la vida, entonces no aprenderíamos nada. Sea cual sea nuestro nivel de Reiki, todo depende de cómo utilicemos los nuevos recursos que tenemos a nuestra disposición. Como te digo, el reiki ayuda pero hay que practicar, practicar y practicar, ¡no hay otra! 
La iniciación en sí te ayuda mucho, ¡claro que sí!, pero es importante utilizar las diferentes técnicas de Reiki según el objetivo que tengamos (sanar a nivel físico, alcanzar nuestras metas, sanar una relación…). Un maestro te puede iniciar mil veces pero si luego tú no prácticas, llevas una vida poco sana, no gestionas bien tus emociones (te enfadas, tienes miedos…), entonces no te vale de nada. 

TRAMPA Nº 3
Cuanto más trabaje con Reiki, más feliz seré 
Sí, y no: esto tampoco es del todo correcto. Como todo en la vida, el trabajo con Reiki se debería integrar armoniosamente con el resto de nuestras actividades. Es normal que después de un curso de Reiki la mayoría de nuestros pensamientos se centran en el maravilloso regalo que hemos recibido. Pero ya sabes que “en el equilibrio está la virtud”. Si nos hacemos radicales y sólo nos dedicamos exclusivamente al Reik, abandonando otros aspectos cotidianos (familia, trabajo, hobbies…) pues estamos en las mismas y se nos desequilibrarán otros aspectos. El Reiki no es la vida en sí; el Reiki estimula la vida. 
Te confieso que cuando yo empecé a practicar Reiki me fascinaba tanto que en algún momento pensé que era tan mágico que me solucionaría la vida casi sin yo hacer nada. Y no hija no, el Reiki nos ayuda un montón a nivel físico, mental y emocional pero nosotros tenemos que colaborar practicando, practicando y practicando, llevando una vida sana, procurando seguir los cinco principios de Reiki y así sí que se producirá esa magia de sentirnos muy felices, con mucha paz y atraeremos cosas buenas a nuestras vidas. 
Espero que estas aclaraciones sobre ciertas creencias falsas que nos hacemos tras una iniciaciónd e Reiki te ayuden. Un abrazo y mucha suerte con tu práctica