Los cuarzos son un buen complemento
a la hora de dar una sesión de Reiki ya que ayudarán a la sanación y
equilibrado de energía acelerando el proceso.
Las características de cada
cristal son diferentes, sin embargo, se complementan entre ellos para aportar
los beneficios deseados en una sesión de Reiki.
Su uso es muy fácil,
simplemente se trata de situar un cuarzo en cada uno de los siete chakras y con
su color correspondiente a cada chakra.
Antes de usarlos es
necesario limpiarlos ya que los cristales se cargan con energía sanadora pero
también tienen la capacidad de cargarse con la energía densa (esa que llamamos “negativa”)
de los lugares donde han estado.  Para ello
hay varias maneras, entre ellas:
  •  Poner los cuarzos en un cuenco con agua y sal
    marina durante 24 horas, luego los sacas y los secas.
  •   Dar reiki a cada cuarzo durante unos 5
    minutos o hasta que veas que ya deja de fluir la energía. 
  •    Limpieza con
    incienso de sándalo puro: pasar el cuarzo 7 veces por el humo del incienso de
    izquierda a derecha, lentamente. Una vez terminado, se lava el cuarzo bajo un
    chorro de agua y está listo para su uso.

Es importante limpiarlos
entre sesiones y lo ideal es que cada paciente se lleve sus propios cuarzos.
Reiki con cuarzos

Como digo, el procedimiento
es muy sencillo y no hace falta ahondar mucho en la naturaleza de los cuarzos ,
etc.. simplemente colocar las gemas en los chakras principales de la siguiente
manera:
Chakra raíz: elige
una piedra de color rojo, marrón o negro y lo pones cerca de la base de la
columa o, si el paciente está boca arriba también puedes situar un cuarzo en
cada pierna (donde empieza el muslo).
Segundo chakra: piedra de color naranaja
Plexo solar:
piedras de color amarillo, siendo las ideales de forma genérica el cuarzo
citrino y el ojo de tigre.

Chakra corazón: color rosa o verde, siendo las ideales el cuarzo
rosa y el cuarzo verde, también llamado aventurina.
Chakra garganta: piedras de
color azul claras, siendo para mi gusto la ideal el cuarzo azul. 
Tercer
ojo:
 situar una piedra color indigo en el entrecejo.  La amatista o cualquier gema de color
violeta.

Chakra
corona
: sitúa
una piedra de color blanco o violeta (un cuarzo blanco o una amatista) por
encima de la coronilla.