Otra de las «preguntas del millón» que me hacéis cuando me contactáis para ampliar la información sobre mis cursos de Reiki o Registros Akashicos en Madrid es ¿por qué tus cursos duran 5 hrs y otros un fin de semana? y entiendo que os mosqueéis con esa gran diferencia de horarios y precios así que por eso me dispongo a aclararlo desde mi experiencia y la de algunos de mis alumnos.
La duración de mis cursos es de unas 5 horas y la diferencia entre los largos e interminables cursos de fin de semana es que te rellenan los tiempos con dinámicas de grupo y ejercicios que no tienen que ver con el Reiki ni con los Registros Akashicos
Te garantizo que mis cursos cumplen el programa exigido por la Federación Española de Reiki y más. Después de mis cursos yo siempre estoy a tu disposición para aclarar dudas y puedes repetir el curso gratis tantas veces como quieras.
Yo soy muy práctica y cuando en su día desarrollé los cursos de Reiki y de Registros Akashicos decidí ir al grano, explicando lo que hay que explicar y cobrarte menos sin hacerte perder el tiempo. 
Photo credit: ckaroli / Foter / CC BY-SA
El Reiki es super-fácil de aprender, lo difícil es encontrar el tiempo para practicarlo y si diseño un curso para que dure un fin de semana te lo tengo que rellenar con dinámicas de grupo «comodín» (como yo las llamo) y te cobraré el doble por el tiempo que te dedico. 
Yo misma he cursado como alumna muchísimos cursos de terapias alternativas (Reiki, Registros Akashicos, Flores de Bach, PNL, etc….)  algunos de los cuales me han costado una pasta y con horarios interminables innecesariamente. 
Por ejemplo, me han rellenado horarios que si con la película «Y tú qué sabes» como apoyo del Reiki a distancia, luego un coloquio para debatir la película (2 horas de relleno), que si ahora os ponéis por parejas y os miráis a los ojos para sentir el amor incondicional (media hora); que si otra media hora para abrazaros (otra media hora). Y la peli está muy bien, pero prefiero verla en mi casa y también me encantan los abrazos, pero abrazos sinceros y que duren unos segundos no minutos porque se hace incómodo.
El momento que más lo flipé fue con una maestra que después de comer (hora y media) nos dijo que nos ponía una meditación buenísima del Youtube para que elevar nuestras vibraciones (otra media hora de relleno) y al cabo de unos minutos ¡¡¡¡la oigo roncar!!!!  y yo pensando «¡no me lo puedo creer! espero que para las 6 se haya despertado» jajajaja
¿Tú crees que con una musiquita del youtube puesta en un portátil que suena a lata se te van a elevar las vibraciones o se te va a activar a tope la glándula pineal? ¡pues no!!! las vibraciones se elevan practicando muuucho Reiki o yoga o taichi, comiendo sano, haciendo deporte… y lo más importante, las vibraciones se elevan siendo buena persona, autoestudiándote día a día y corrigiendo errores para crecer como persona, ¡así se elevan las vibraciones para alcanzar la paz y felicidad duraderas!!!! no con una musiquita que suena a lata. Estoy harta de deciros que tanto con el Reiki como con cualquier otra disciplina hay que sudar la camiseta, sino que se lo digan a Nadal. 
Otro relleno: en un curso nos tuvo la maestra hablando dos horas de Buda y de todo lo que estaba aprendiendo del budismo y ya a las 2 horas comenzó con la clase de Reiki.  Y el budismo está genial, a mí me ha ayudado y me ayuda muchísimo en mi vida pero no es Reiki.
Y ya me ha pasado en tres cursos de diferentes técnicas en las que los maestros estaban muy cansados de tanto canalizar y se tuvieron que echar la siesta y por consiguiente teniéndonos a los alumnos deambulando una hora por la calle para hacer tiempo hasta que el señor o señora de turno se levantara de la siesta. Y yo me preguntaba: «si me acabas de decir que esta técnica tan maravillosa (Reiki, Registros Akashicos…) te da mucha energía y te encuentras genial, ¿cómo es que estás hecho polvo de canalizar y te tienes que echar la siesta???!!!
Y la lista sería interminable tanto con mis experiencias como con otras que algunos alumnos y amigos me han contado y son de risa. Así se rellena un fin de semana y al Maestro de turno le tienes que pagar un pastizal por todo ese tiempo; ahí está la diferencia.